Me aficioné a hacer helados cuando estaba con la dieta exenta de proteína de leche de vaca por la alergia de Martín. Me compre una heladera y ahora, aunque ya ha superado la alergia, continuo haciendo helados y así me aseguro que sean sin gluten. Me encanta ir probando y cambiando de sabor pero el clásico y el que no puede faltar es el de chocolate. Además es muy fácil y algo más sano, el inconveniente es que debes tener la heladera en el congelador 24 h antes...de no ser que tengas un congelador grande, tipo arcón, como yo, y la tengas siempre a punto!!
INGREDIENTES:
- 500 ml nata para montar fría
- 1 Natilla de chocolate (no es necesaria pero como estaba por la nevera muerta de risa...antes de que caduque...a la saca!)
- 1 Cucharada de miel o azúcar invertido (para evitar que se formen cristalizaciones
- 5 Cucharadas de cacao en polvo (si no os gusta el chocolate fuerte poner menos)
- 1/2 tableta de chocolate fondant
- 1 Nuez de mantequilla
- Virutas de chocolate blanco y negro.
- Sirope de chocolate
1. Deshacer el chocolate fondant con la nuez de mantequilla y reservar.
2. En un bol, mezclar la nata con la miel, el cacao, la natilla y mezclar bien, añadir poco a poco el chocolate deshecho y con una batidora mezclar hasta que quede una masa espesa. No hace falta llegar a montar la nata, pero si que quede aireada. Meter en la nevera y dejar enfriar un par de horas más.
3. Pasadas unas horas poner en la heladera unos 45 minutos, las virutas incorporarlas al final, unos minutos antes de que termine.
4. Pasar el helado a un recipiente para volverlo a poner en el congelador. Ahora es el momento de decorar con el sirope, a mi me gusta que quede mezclado con el helado, así que lo pongo y le doy unas vueltas con una cuchara, lo justo para que no se mezcle demasiado.
Este helado no falla, y a los más pequeños les encanta. Cualquier hora es buena para tomar un helado casero... :-)
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